autor: Dr. José Luis Domenech alias La Garza
Libro del Cincuentenario del Liceo Militar General Espejo
Página de la Promoción XIX
De entrada, nomás, los jíbaros.
Al día siguiente ¡la pichicata!, con poción “Todd” (*) para el que arrugaba, y tres días a sopa sin sal...
Manual de Urbanidad en mano, el Encargado de Compañía intentó hacernos comer las empanadas con cuchillo y tenedor. Como las órdenes “primero se cumplen y después se discuten”, en eso estábamos cuando el Oficial de Semana advirtió que al igual que el pollo, pueden llevarse a la boca con la mano derecha, siempre que no se utilice para ello más que la tercera falange de los dedos pulgar, índice y medio...
Fusil: Mauser (modelo argentino 1909), goteando “Lubrilina” por el “mundo de la manivela”...
Para orden cerrado e instrucción, uniforme marrón terroso: bombacha, chaquetilla, capote y birrete, todo en lana rústica...
Para los días templados: garibaldina...
- A ver cadete, repita conmigo: ¡ tí-rí-ta !
- Tirita, mi capitán!
- Bueno, ahora átesela por debajo del borceguí.
- ¿Como los tirapiés, mi capitán?
-¡No! Tagarna, calandraca, bípedo implume, ¡En el tobillo! Haga cien flexiones de ojos!
Para el aula, uniforme como el de salida pero de segundo uso, sin listones negros en el pantalón, y con los bolsillos cosidos para que “no nos crecieran pelos en las manos”. En la cabeza: birrete azul (unido al medio con Goma de Pegar “Pelikán”, los más cancheros).
El cepillo de dientes con las cerdas hacia el norte, el quitamanchas “Esso” o “Solveneter” a la izquierda del talco “Poliana” o “Palmolive”. Tres dedos a la derecha el desodorante en barra “Odorono”. Más abajo la “tricota” y el buzo (partes superior e inferior) plegados con las tablitas reglamentarias, todo sobre estantes forrados con hule negro sujetado con chinches de tres puntas...
- Aro sin gorra, aro sin gorra !!
Bufano, Inchauspe, caballeros de ley !
Los cuatrimestrales, Milton, el Percherón, la Güevadita Negra, Benito (moved el madero volante para que penetre el céfiro refrescante!!!)
El Pepín Cascarón, el Mazacote, el Paremecio, la Morsa Lírica, el Cheché, el _Feto...
1969, cuarto año: el Prefecto del ciclo básico osó pisar el patio del ciclo superior... Su apodo se hizo grito en las gargantas. Voz en cuello el bisilábico apelativo, machacado al compás de las palmas, llegó a oídos de un oficial que nos hizo quedar a todos privados de toda salida. Ese domingo: visita de novias, madres y padres. Estos últimos con sus Falcon, Chevy II y algún Torino 380 W. Las picadas del viejo autódromo se trasladaron ese fin de semana al circuito comprendido entre la motorizada y la capilla. No se mató nadie gracias al “Divino Maestro”.
¡Cuánta vida nuestra!
Nadie nos pregunte en qué lo notamos, pero la “Orden del Sol” se nos quedó estampada en la frente, aún sin gorra, con canas y menos pelo.
¡Salud, camaradas del Liceo, brindemos con nuestra canción alta la frente y firme el corazón !
(*)Poción “Todd”: Alcohol 60º: 40g + Tintura de Canela: 5g + Jarabe simple: 30g + Agua destilada: 75g (Fórmula develada por el Gordo Elst, suboficial mayor de la enfermería)
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